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Se hablaba en la previa de esta jornada de la oportunidad que debían aprovechar los primeros de la tabla al enfrentarse a equipos, en teoría, inferiores, y que la clave de la fecha estaría en quién se dejaba puntos ante ellos. Y fue esto lo que sucedió, porque el fútbol (en general) y la Premier League (en particular) no entiende de teorías, y su único argumento es la práctica en el gramado.
Así, el Manchester City logró reducir su diferencia con el líder a sólo 4 puntos, al ganarle 1-0 a un pobre Reading que ya encadena su séptimo revés consecutivo y que sigue en el fondo de la tabla; no quiere decir esto que haya sido fácil para los Citizens, quiénes con muchas bajas y poco fútbol solo pudieron anotar en tiempo de reposición. Por su parte, el líder Manchester United contribuyó a la causa de su perseguidor al no poder derrotar al Swansea City en el Liberty Stadium. Pese a haberse adelantado en el marcador, los Red Devils desaprovecharon numerosas ocasiones de aumentar su ventaja y vieron cómo, además de empatar, Michu se colocaba en solitario como líder goleador (con 13 dianas) por encima de Van Persie.
Tampoco pudo beneficiarse el Tottenham, que empató sin goles como local ante el «Rey» de este apartado, el Stoke City (10 empates en la campaña). De esta manera los Spurs perdieron su cuarto lugar en la tabla, posición que retomó el Arsenal al vencer por la mínima, y con gol de penal de Arteta, al Wigan Athletic. También sacó provecho el Everton, que en su visita al Upton Park logró reponerse de las bajas y vencer por 1-2 a un West Ham United que suma su cuarta derrota en sus últimos seis compromisos y que pierde posiciones de manera preocupante.
Otro de los intereses de la jornada pasaba por ver que rachas se cortaban primero. Así, encontramos que el West Bromwich, en su visita al Norwich, salió de su bache negativo (en el que acumulaba 4 encuentros sin ganar) al derrotarlos por 1-2; a su vez, los Canarios vieron truncada su espectacular seguidilla de 10 partidos sin perder.
Logró tomar algo de aire el Newcastle United (que sumaba seis reveces en sus últimos siete compromisos) al doblegar por la mínima a un triste Queens Park Rangers que, tras conseguir su primera victoria de la campaña apenas la jornada pasada, cae a las primeras de cambio. Y, finalmente, el Chelsea logra ganar en casa (¡y de qué manera!) por primera vez desde la llegada de Rafa Benítez. Le endosaron un humillante 8-0 al Aston Villa, que vio como frenaban abruptamente su racha de cinco partidos sin conocer derrota.
Completaron la fecha la victoria del Sunderland por 0-1 en casa del Southampton, y el 4-0 que le propinó el Liverpool (en el mejor partido que han tenido esta temporada) al Fulham, equipo que tiene una sola victoria en las últimas 10 jornadas.