
El mes de marzo da inicio con jornada de Copa Libertadores. Este martes Monagas y Everton de Viña del Mar se vieron las caras luego de la goleada 3 – 0 conseguida por el conjunto chileno en el partido de ida por la fase 2 días atras. El conjunto monaguense peleó hasta el final, pero no le alcanzó para remontar.
Diego Contreras (@DiegoTo11713278)
Los criollos de Monagas SC se midieron por segunda vez contra el equipo chileno de Everton por la fase 2 de la Copa Libertadores. Esta vez, la localía cayó por cuenta de los monaguenses, que supieron como incomodar al conjunto de Viña del Mar, achicando la diferencia de goles en el marcador global antes del pitazo final.
Los locales abrieron con un 3 – 5 -2 que de inmediato se vieron parcialmente dominados por el conjunto chileno, sin gol en la primera mitad.
El Monagas SC de Jhonny Ferreira buscó la remontada desde iniciado el encuentro. Debían marcar 3 goles para empatar la goleada vivida en Viña del Mar.
Si bien la primera mitad cerró sin goles, los locales orquestaron un partidazo a partir de la segunda mitad.
Para achicar la diferencia en el global, Oscar Gonzalez marcó un derechazo al 46`de partidoo tras recibir el rebote al borde del area.
El Monagas recibió esperanza que transformó en una ofensiva arrasadora que jamás obtuvo el segundo tanto. Los monaguenses se quedaron pisando el area rival, sin marcar.
Así se desarrolló el partido favorable para los locales, hasta el minuto 76`de partido, cuando Luis Guerra, a raíz de una falta intencionada, quedó fuera del partido con una tarjeta roja, dejando a los criollos con 10 en cancha.
No mucho cambió la superioridad numérica de los visitantes, que si bien pisaron el area monaguense en varias ocasiones, el luminoso se quedó con 1 – 0 hasta el pitazo final.
El conjunto venezolano dominó con 18 remates por sobre los 5 de Everton, 4 de esos 18 remates directos al arco de los chilenos.
Fue así como el Everton triunfó, accediendo a la fase de grupos de la Copa Libertadores, a la espera de sus proximos rivales, a la vez dejando plantados a los de Monagas en el Monumental de Maturín, resignados a pelear por los torneos locales.